Tenerife 2020




 

Después de mucho tiempo volví a viajar. Y no fue casualidad que mi vuelta a los viajes fuese con destino a mi archipiélago favorito: las Islas Canarias. En esta ocasión no visité mi hogar, Gran Canaria, sino que aterricé en Tenerife. Por delante tenía el objetivo de sacar el máximo partido a 2 semanas en las que poder perderme por el sur de la isla y explorar a mi gusto.


De Birmingham a Manchester

Mi viaje empezó bastante temprano, en concreto a las 3:00 de la mañana. Sin embargo todos los que somos viajeros de corazón sabemos que los horarios nunca son un problema cuando de una aventura se trata. Desde la Birmingham Coach Station, cogí una guagua (o autobús) que me llevó hasta el aeropuerto de Manchester. El trayecto duró algo menos de dos horas, incluyendo paradas en pueblos como Dudley o Wolverhampton antes de coger autopista rumbo a mi aeropuerto de origen.


Aeropuerto de Manchester

Una vez me bajé de la guagua, fui en busca de la terminal de salidas. Era mi primera vez en el aeropuerto de Manchester pero la verdad es que es una instalación por la que es fácil orientarse, además pude disfrutar de un pequeño paseo hasta llegar a la terminal 3 (a pesar de la lluvia). Por delante tenía unas cuantas horas de espera hasta poder pasar el control de seguridad. Siempre he sido un viajero previsor y me gusta llegar con bastante antelación a los aeropuertos. Por eso nunca faltan en mi mochila uno o incluso dos libros de lectura. También me aseguro llevar conmigo mi journal o algún que otro folio junto con un bolígrafo. Las mejores ideas llegan en lugares inesperados, como la terminal de un aeropuerto, y siempre viene bien tener material a mano para dejarlas por escrito.


El vuelo de ida

Mi anterior viaje había sido en Marzo, semanas antes de que se implantase el confinamiento, por lo que este viaje a Tenerife iba a ser mi primer vuelo en la situación de nueva normalidad en tiempos del COVID. Por lo general, las principales medidas sanitarias como el uso de mascarilla y de geles se respetaron tanto en el aeropuerto como en el avión. Pero no vivimos en una sociedad perfecta, así que también vi casos en los que las medidas no se respetaron como por ejemplo a la hora de embarcar la aeronave. Tras 4 horas y media de vuelo, aterricé en el aeropuerto de Tenerife Sur, siendo también mi primera vez en pisar este aeropuerto. Para el recuerdo queda la imagen de la isla desde la ventanilla del avión, con el Teide a un lado y Gran Canaria al otro.


Playas

Tras casi 6 meses en Inglaterra, estaba deseando encontrar la playa más cercana. Mi estancia en la isla fue principalmente en el pueblo de El Fraile, una zona multicultural alejada de los centros turísticos pero a corta distancia tanto de ellos como del aeropuerto Sur o el puerto de Los Cristianos. La playa más cercana es Las Galletas, playa con muchas rocas pero ideal para familias por el poco oleaje y profundidad. Cerca de aquí, hay una pequeña avenida marítima con buenos restaurantes. Pero de la gastronomía hablaré más tarde. A través de este paseo también se puede acceder al puerto deportivo, donde se ofertan actividades acuáticas como motos de agua, paseos en lancha, snorkel... 

Pero si de elegir playa se trata, sin duda para mí la mejor ha sido la de Fañabé. Situada un poco más al sur de la isla, en la zona de Las Américas, cuenta también con empresas dedicadas a las actividades acuáticas (con mayor oferta que en Las Galletas). A pie de playa hay diferentes servicios como hamacas, sombrillas, camas balinesas o establecimientos que sirven cocktails

Próxima a Fañabé, se encuentra la playa de Puerto Colón. Bastante más pequeña que la primera, pero igual de recomendable por su arena libre de rocas pero sobretodo por sus aguas cristalinas, ideales para aquellos que, como a mí, les encanta practicar snorkel. Aquí también puedes encontrar un puerto deportivo y varias tiendas para comprar souvenirs y todo lo necesario para un día de playa. Precisamente desde esta ubicación fue desde donde alquilé una lancha con el grupo de amigos que me acompañó en este viaje. Bastante barato, con buenas condiciones de reserva, y sin necesidad de licencia. Pudimos disfrutar de la lancha durante algo más de una hora, tiempo suficiente para ver incluso un especimen de tortuga. Para cerrar el día, no pude resistir darme un chapuzón nocturno.

Otras dos playas que recomiendo visitar en el sur de Tenerife son las de El Camisón y El Duque. En esta última disfruté de uno de los mejores atardaceres, además cuenta con un pequeño acantilado en uno de los extremos desde donde los más intrépidos pueden sumergirse en el mar.


Una joya oculta

Sin duda una de mis mejores experiencias durante este viaje fue el descubrimiento de la piscina natural de Alcalá. Este tipo de lugares son bastante frecuentes en las costas canarias, y permiten disfrutar de una experiencia de playa diferente. Aquí pude volver a practicar snorkel, llegando incluso a explorar una pequeña cueva. La piscina es accesible pero hay que tener cuidado de no resbalar especialmente en la rampa de entrada. Otro punto a su favor es que cuenta con un puesto de socorrista al lado y una amplia avenida marítima por la que pasear al atardecer admirando la arquitectura de algunos de los hoteles de la zona.


Senderismo por las lomas del Teide

En este viaje no todo fue mar, también tuve tiempo de "perderme" por la montaña. Concretamente en el punto más alto de España. Durante el ascenso en coche paré en diferentes miradores (como el de Chirche) desde los que se ve a la perfección tanto la vegetación de la isla, como el famoso mar de nubes, e incluso la isla de La Gomera. Finalmente, comencé mi exploración siguiendo una parte del sendero número 13, bastante bien señalizado y de dificultad media. Este sendero te permite apreciar cómo la acción del tiempo y las erupciones volcánicas del propio Teide han moldeado el terreno. La red de senderos en sí se extiende por gran parte de la isla y es una experiencia más que recomendable para todo viajero y que requeriría de un post particular en el que documentar todos sus detalles y entresijos. También tuve la oportunidad de visitar Pino Gordo, un ejemplar de pino canario al que, según la tradición, hay que abrazar para recibir energía positiva de la naturaleza. Y eso hice.


Mi primer guachinche 

Esta experiencia gastronómica es apreciada tanto por locales como por visitantes. Tras mi excursión al Teide, paré en uno de los restaurantes locales conocidos como guachinches. Allí pude disfrutar del siguiente menú:

- Cortezas recubiertas de gofio

- Queso frito aderezado con mermelada de arándanos

- Garbanzos con chorizo

- Carne de cerdo con papas

- Natillas

Sin duda mis amigos y yo terminamos el día con el mejor sabor de boca posible. En tu próxima escapada o vacación en Tenerife, no olvides buscar el guachinche más cercano y disfrutar de la gastronomía canaria en un ambiente familiar

Durante los 16 días que pasé en la isla, también tuve tiempo de preparar algunas recetas locales con mis amigos. Las pancakes caseras de gofio y plátano, dos de los productos canarios más conocidos, fueron la revelación del viaje junto con la sangría fabricada en casa. También hubo tiempo de degustar platos muy echados en falta cuando uno reside en Reino Unido. Desde una buena paella, hasta las mejores tapas incluyendo gambas al ajillo, calamares fritos, pimientos de padrón...


El vuelo de vuelta

Con la sensación de tristeza por dejar mi tierra, volví a subirme a un avión para regresar a Birmingham. Es verdad que tanto en la ida como en la vuelta, me sorprendió lo "vacíos" que iban los aviones, aunque en tiempos de COVID es comprensible que no haya el mismo número de pasajeros. El vuelo fue normal, aunque varios pasajeros utilizaron la táctica de comprar medio carrito de comida y bebida para no tener que usar la mascarilla. Una vez en tierra, nadie solicitó los formularios de viaje obligatorios a rellenar antes de viajar. Únicamente tuve que pasar el control de pasaporte a través de una máquina en la que introduces el documento y miras a una cámara que te enfoca. Para los que hayan visitado o pretendan volar pronto al aeropuerto de Birmingham, deben saber que el tren que conecta la terminal con la estación de trenes del aeropuerto no está funcionando actualmente. En su lugar, una guagua recoge a los pasajeros y los lleva directamente a la estación desde donde coger un tren al centro o a cualquier otra ciudad. 


Cuarentena obligatoria en destino

Son muchos destinos los que han adoptado esta medida. En mi caso, este es mi noveno día de cuarentena preventiva. A pesar de que al rellenar el formulario previo a entrar en Reino Unido te dicen que pueden llamarte por teléfono para comprobar que estás cumpliendo la medida, parece que esto es simplemente una advertencia para asustar a los viajeros. A día de hoy no he recibido ninguna llamada ni a mi número personal ni al teléfono fijo. Aún así recomiendo cumplir con esta medida en tu próximo viaje siempre que sea posible, no solo por evitar posibles multas, sino porque uno no sabe si puede portar el virus, puesto que muy pocos países o destinos realizan PCR a la llegada.

¡Espero que les haya gustado este artículo!

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